"Soy del color de tu porvenir

me dijo el hombre del traje gris

“no eres mi tipo” le conteste

y aquella tarde aprendí a correr."

-¿No te dás cuenta de lo insignificante que resulta casi siempre la existencia?

- A mí no me preguntes...

A veces dudo si ser piadoso y matarte, o por el contrario, ser malvado y dejarte vivir.

Yo no puedo detener el tiempo,
ni puedo mandar sobre tí ni sobre él,
no puedo volver a aquel lugar o quizas si,
pero nunca será el mismo lugar,
no puedo escapar, no puedo no hacerlo,
no puedo volar,no puedo crear,
no puedo pensar, no puedo imaginar,
no puedo soñar, no puedo,
solo puedo...
bueno ya no se muy bien ni lo que puedo hacer,
querer es poder,
pues yo quiero poder.

Ceguera...a veces vivimos ciegos, ciegos de nuestra propia realidad, otras...abrimos los ojos. Pero cuando has sido ciego y tambíen has mirado, ¿qué elegirías? El ciego de realidad vive en otro mundo, un mundo aparte, posiblemente mejor, la ignorancia no lo mata, le hace feliz, pero el dia que vé se da cuenta de cuanto le gustaria volver, la nostalgia le va destruyendo poco a poco aunque siempre quedará la esperanza, algo tan abstracto y tan reconfortante a la vez. Tanta gente vive de esperanzas, esperanza de algo que muchas veces nunca se llegara a cumplir, pero siempre te quedara el "Con lo bonito que podría haber sido si..."

Pero si realmente todos somos unos extraños.

Estar loco no es ser diferente. Es ser como tú o como yo pero amplificado.